Dicen que el portero de fútbol es un jugador único en el equipo: lleva otra camiseta, está solo y es al único que le permiten tocar la pelota con las manos. A esas diferencias, el número 1 del Sporting suma el hilar un discurso sin frases tipo 'fútbol es fútbol', salir a pedir perdón tras encajar seis goles del Barça cuando defendía la meta colchonera y convertir al Sporting en el equipo que más partidos ha permanecido invicto esta temporada. Iván Cuéllar, 'Pichu', lo para todo.
-El 24M, ¿dónde habrá más público: en El Molinón o ante las urnas?
Quiero que lo haya en El Molinón. Mejor elección que esa, ninguna.
-Los votantes seremos árbitros. ¿Expulsaremos a muchos?
Lo que se mantiene en el tiempo cansa. La gente quiere cambios. En política hay que renovar el banquillo.
-¿Puede avanzar un país en el que todos saben la alineación del equipo y nadie la de las candidaturas?
El problema está en que lo que interesa es que no sepamos nada.
-Amenazan con huelga. ¿No temen a Fátima Báñez y su reforma?
(Risas). ¡Hay tantas reformas, y ninguna constructiva! Los futbolistas no amenazamos, solo defendemos nuestros derechos. Como trabajadores es lo mínimo que debemos hacer.
-¿Dónde actúan más: en el anfiteatro de su Mérida o en el Congreso?
(Carcajadas). Creo que hay muchos actores en el Congreso. Incluso se duermen. Fíjese qué importancia le dan a su trabajo.
-Y 'fair play', ¿dónde hay menos: en el fútbol o en la política?
(Risas). Un poco de todo. En la política intentan seducirnos con buenas palabras cuando, realmente, lo que quieren hacer es otra cosa.
-El Trofeo Zamora que tiene ...
Tenemos, tenemos...
-Pues ese trofeo que tienen al alcance, ¿lo perderán por los goles que nos meten los políticos?
Creo que ya nos lo han quitado. Los políticos no paran de meternos goles. Más que políticos son prometedores. Prometedores de aquello que nunca cumplen.
-¿Podemos y Ciudadanos van a ser el particular Betis para el invicto bipartidismo?
(Risas). Puede ser. El Betis acabó con nuestra imbatibilidad. En cuanto a política se refiere, ahora se requiere una mezcla continua de equipos para tener más poder e intentar lograr esa renovación que queremos, creo, todos.
-¿Monedero le ha metido un gol en propia meta a Podemos?
(Risas). Creo que sí. Creo que Monedero ha metido uno de los mejores goles. Y sin darse cuenta.
-¿La corrupción es la fractura de menisco de la política?
Una lesión es un problema físico. La corrupción entra más en el terreno de la moral. Es mucho peor el daño moral que el daño físico. La corrupción es lo primero que tenemos que eliminar.
-Si sacáramos tarjeta roja a los corruptos, ¿habría cartón suficiente?
Más que producir tarjetas, tendríamos que producir nuevos partidos políticos. Pero también banqueros, empresarios... De todo un poco.
-Ejem... ¿Incluso dueños de equipos de fútbol?
(Risas). También, también.
-Para goleada, la de Bárcenas a Rajoy. Nada que ver con aquel 6-1 del Barça al Atlético de Madrid, de cuyo portero no me quiero acordar...
(Carcajadas). Hay muchas semejanzas entre el fútbol y la política. Desde luego, Bárcenas está goleando. Lo que pasa es que hay que saber encajar los goles.
-Al día siguiente de aquel partido usted pidió perdón. ¿Le copió el Rey eso de 'lo siento, me he equivocado, no volverá a suceder'?
(Risas). Son cosas totalmente distintas. No obstante, lo fácil sería echar las culpas a otro. El 'mea culpa' existe poco y también la percepción de que somos imperfectos.
-A su compañero Íker, ¿le están sacando de sus casillas?
(Risas). Él ya lo ha demostrado todo, en su club y con la selección. Merece un respeto que no está teniendo.
-Dicen de usted que es muy cabezón y que no teme a nada. Que las lesiones las supera en un plis.
(Risas). En lo de cabezón aciertan.
-Si no teme a nada, ¿se atreve con la quiniela del 24M?
Yo voy con el que gane (carcajadas).
-¿Y el 25M, qué?
Como siempre decía Manolo Preciado: volverá a salir el sol.
Foto y fuente: Comercio Digital
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