El Sporting ganó por 3-2 en El Molinón al Éibar en partido
de Liga correspondiente a la sétima jornada con tres goles de Scepovic.
El Sporting perdió ante el cuadro armero su condición de imbatido, pero no la de invicto en El Molinón y continúa instalado en la parte alta de la clasificación.
Sporting: Cuéllar; Lora, Bernardo, Iván, Canella; Bustos, López Garai, Álex Barrera; Isma López, Stefan Scepovic y Hugo Fraile (Dennis, Luis Hernández, Casquero, Nacho Cases, Santi Jara, Carmona y Guerrero).
Éibar: Irureta; Albentosa, Capa. Errasti, Arruabarrena, Dani García, Yuri, Lillo, Morales, Jota y Raúl Navas (Kijera, Añibarro, Urko Vera, Eizmendi, Diego, Rivas y Diego Rivas).
Incidencias: Tarde de nubes y claros en Gijón con alguna llovizna intermitente. Temperatura agradable. Terreno de juego en buen estado. 15.081 espectadores. El Éibar jugó con su segunda equipación, de doble tonalidad verde. Se guardó un emotivo minuto de silencio en los prolegómenos del partido en memoria de Gundemaro, autor del primer gol del Sporting en Primera División. Iván Hernández, por el Sporting, y Arruabarrena, por el Éibar, oficiaron de capitanes. Partido televisado en directo por Telecable (Más que Tele) para Asturias y por ETB para el País Vasco.
Árbitro: Santiago Jaime Latre, del Comité
Aragonés. Amonestó a Arruabarrena, Capa, Yuri y Raúl Navas, por el Éibar, y a
Bernardo, Iván, López Garai y Carmona por el Sporting.
Madrugó el gol en la cabeza de Scepovic, que remató certeramente en el minuto 4, tras recibir desde la derecha. Buen centro de Isma López, al que había dejado en corto Barrera, que mejoró el serbio al convertirlo en el primer tanto de la tarde. Su sexto tanto de la temporada.
El tempranero cambio en el guión del partido obligaba al Éibar a estirar sus líneas y a buscar la posesión del balón. El Sporting, por su parte, se posicionaba sobre el terreno de juego. También lo hacía el colegiado, que echaba pronto la mano a su bolsillo para mostrar las primeras tarjetas amarillas, a Arruabarrena y Bernardo, respectivamente.
Hugo Fraile buscaba la línea de fondo por la izquierda, pero su centro en el minuto 20 no encontró rematador porque se interpuso Irureta en la trayectoria del balón.
En una salida rojiblanca al contraataque, Capa veía la segunda amarilla de su equipo. Mandaba el Sporting.
Un minuto después, Scepovic lanzaba otro contragolpe, en el que sirvió a Hugo Fraile, pero detuvo su remate nuevamente Irureta. Se invertían los papeles, pero no el protagonismo en el mando.
La línea defensiva rojiblanca estaba muy adelantada, lo que obligaba al Éibar a tratar de controlar muy alejado del área rojiblanco mientras arriba Scepovic fijaba a los centrales.
Hugo Fraile intentaba el disparo desde lejos. También lo intentó cruzado Arruabarrena. En ambos casos, fuera.
Tardaba en llegar el segundo tanto rojiblanco y en el 44 el que llegó fue el del empate en El Molinón, al aprovechar Capa un centro de Yuri desde la izquierda: picó de cabeza superando el balón a Cuéllar. Era el primer remate entre los tres palos de los vascos en una buena acción. Máxima rentabilidad y primer gol recibido esta temporada por el Sporting como local.
En la reanudación volvieron a saltar los mismos 22 jugadores.
Iván vería la tarjeta amarilla. A continuación la vio Yuri en un penalti que le hizo a Barrera, al que agarró claramente, y que el árbitro señaló a instancias de uno de sus asistentes. Lanzó Scepovic... y gol. De nuevo fue madrugador el Sporting. Era el minuto 7 de la reanudación y el sétimo gol de la temporada para el internacional serbio.
El Sporting controlaba y Sandoval introducía un nuevo cambio: Barrera, cojeando, abandonaba el terreno de juego y le suplía Carmona.
En un contraataque, Carmona cruzó excesivamente el balón en un chut que se fue abriendo según se acercaba el balón a la portería rival.
El Sporting jugaba al abrigo del marcador y el técnico de Humanes agotaba los cambios. El siguiente en entrar era Guerrero en sustitución de Scepovic. El Molinón se puso en pie para despedir al trigoleador de la tarde.
En el 38 el Éibar sacó petroleo de un córner, en una acción de rebotes y rechaces de la que se aprovechó Urko Vera para marcar y apretar el resultado.
El Sporting necesitaba serenidad ante un Éibar que pasaba a fiar su suerte del juego directo con el cronómetro en su contra. Los instantes finales eran de tensión, con tres minutos añadidos. En el desarrollo de los mismos apareció una mano milagrosa de Cuéllar en un remate de fortuna visitante, que surgió parabólico, poco menos que fruto nuevamente de un rechace.
Sufrido final que acabó por llegar y que dejó los tres puntos en El Molinón.
La baja por tarjetas de Mendi, que supuso la presencia en el
equipo inicial del capitán Iván Hernández, y la recuperación de Canella, tras
la rotura fibrilar que sufrió frente al Mallorca, supusieron la remodelación de
la defensa rojiblanca respecto a la pasada jornada con la excepción de
Bernardo. A la novedad de los antedichos, en el centro de la zaga y en el
lateral izquierdo, respectivamente, se sumó la vuelta de Lora a su lado derecho
natural.
Madrugó el gol en la cabeza de Scepovic, que remató certeramente en el minuto 4, tras recibir desde la derecha. Buen centro de Isma López, al que había dejado en corto Barrera, que mejoró el serbio al convertirlo en el primer tanto de la tarde. Su sexto tanto de la temporada.
El tempranero cambio en el guión del partido obligaba al Éibar a estirar sus líneas y a buscar la posesión del balón. El Sporting, por su parte, se posicionaba sobre el terreno de juego. También lo hacía el colegiado, que echaba pronto la mano a su bolsillo para mostrar las primeras tarjetas amarillas, a Arruabarrena y Bernardo, respectivamente.
Hugo Fraile buscaba la línea de fondo por la izquierda, pero su centro en el minuto 20 no encontró rematador porque se interpuso Irureta en la trayectoria del balón.
En una salida rojiblanca al contraataque, Capa veía la segunda amarilla de su equipo. Mandaba el Sporting.
Un minuto después, Scepovic lanzaba otro contragolpe, en el que sirvió a Hugo Fraile, pero detuvo su remate nuevamente Irureta. Se invertían los papeles, pero no el protagonismo en el mando.
La línea defensiva rojiblanca estaba muy adelantada, lo que obligaba al Éibar a tratar de controlar muy alejado del área rojiblanco mientras arriba Scepovic fijaba a los centrales.
Hugo Fraile intentaba el disparo desde lejos. También lo intentó cruzado Arruabarrena. En ambos casos, fuera.
Tardaba en llegar el segundo tanto rojiblanco y en el 44 el que llegó fue el del empate en El Molinón, al aprovechar Capa un centro de Yuri desde la izquierda: picó de cabeza superando el balón a Cuéllar. Era el primer remate entre los tres palos de los vascos en una buena acción. Máxima rentabilidad y primer gol recibido esta temporada por el Sporting como local.
Con el 1-1 se alcanzó el descanso.
En la reanudación volvieron a saltar los mismos 22 jugadores.
Iván vería la tarjeta amarilla. A continuación la vio Yuri en un penalti que le hizo a Barrera, al que agarró claramente, y que el árbitro señaló a instancias de uno de sus asistentes. Lanzó Scepovic... y gol. De nuevo fue madrugador el Sporting. Era el minuto 7 de la reanudación y el sétimo gol de la temporada para el internacional serbio.
Pero a Scepovic la cifra se le quedaba corta y logró el
tercero. Aprovechó un magnífico servicio de Isma López para meter el pie en la
boca de gol. Tercero del partido y octavo de su cuenta goleadora en la
competición. Extraordinaria media la del ariete.
López Garai abandonaba el terreno de juego y le suplía
Casquero. Urko Vera por Morales sería el cambio visitante.
El Sporting controlaba y Sandoval introducía un nuevo cambio: Barrera, cojeando, abandonaba el terreno de juego y le suplía Carmona.
En un contraataque, Carmona cruzó excesivamente el balón en un chut que se fue abriendo según se acercaba el balón a la portería rival.
El Sporting jugaba al abrigo del marcador y el técnico de Humanes agotaba los cambios. El siguiente en entrar era Guerrero en sustitución de Scepovic. El Molinón se puso en pie para despedir al trigoleador de la tarde.
En el 38 el Éibar sacó petroleo de un córner, en una acción de rebotes y rechaces de la que se aprovechó Urko Vera para marcar y apretar el resultado.
El Sporting necesitaba serenidad ante un Éibar que pasaba a fiar su suerte del juego directo con el cronómetro en su contra. Los instantes finales eran de tensión, con tres minutos añadidos. En el desarrollo de los mismos apareció una mano milagrosa de Cuéllar en un remate de fortuna visitante, que surgió parabólico, poco menos que fruto nuevamente de un rechace.
Sufrido final que acabó por llegar y que dejó los tres puntos en El Molinón.
Fuente: Real Sporting Web
Fotos: Comercio Digital
Fotos: Spo vs Éibar del minuto de silencio por Gundemaro
Yo me quedó con lo positivo del encuentro, que fueron los tres puntos. Mañana subo las fotos, que hice durante el encuentro. ¡ Puxa Sporting !
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