domingo, 24 de agosto de 2014

1ª Victoria de la temporada

Un gol de Miguel Ángel Guerrero y otro de Juan Muñiz dieron la vuelta al partido para que el Sporting ganara ayer en Los Pajaritos. Los rojiblancos empezaron perdiendo en el único despiste defensivo, pero la reacción, con los cambios de Abelardo, fue determinante para cambiar el signo del encuentro.

Rodó el balón y el conjunto local, con un fútbol agresivo, llevó la iniciativa en la primera fase del encuentro. Los sorianos, que asumían su rol de equipo anfitrión, abusaban de los lanzamientos desde lejos para buscar desequilibrar a la zaga rojiblanca, lo que no consiguieron en ningún momento. En la primera parte, de hecho, el conjunto numantino se fue al descanso con tan solo un disparo desviado. Ninguno a la portería de Cuéllar.

El partido resultó rocoso. El Sporting fundamentaba su juego en la solidez defensiva y en cortar las iniciativas sorianas en el centro del campo. Con esa premisa, el ataque quedaba descuidado, con bastantes errores en el pase. La lucha titánica de Guerrero carecía de validez, ya que el balón apenas llegaba en condiciones de ser jugado a la zona de vanguardia.

El problema de los rojiblancos era que el control del balón les duraba muy poco. Los pases imprecisos eran los principales motivos de peligro para la zaga gijonesa, pero los sorianos no estaban finos en ataque. Pese a todo, la primera gran ocasión fue para los pupilos de Abelardo. Un potente saque de banda de Luis Hernández, que rozó con la cabeza Guerrero, fue despejado de forma errónea por un defensa del Numancia hacia su propia portería. Biel Ribas tuvo que responder de forma instintiva para evitar el gol de los gijoneses.

Cumplida la primera media hora, el equipo de Abelardo empezó a tener alguna llegada más. Jony ejecutó un lejano golpe franco demasiado alto. Otra acción del veloz extremo, con toque de Carmona, lo cabeceó Guerrero fuera. Y, al filo del descanso, un centro del mallorquín no pudo ser aprovechado por Barrera, quien llegó desequilibrado al remate en su incorporación desde atrás. Estas acciones provocaron que los sorianos perdieran dominio de partido. En esta fase se endureció el juego por parte de la defensa local, lo que el árbitro cortó con amonestaciones. Fueron unos minutos de juego excesivamente tenso.

El equipo de Anquela se prodigó poco en acciones ofensivas. Solo tuvo una acción de ataque destacada en un tiro lejano de Juanma que tomó una trayectoria envenenada, aunque no fue a la portería de Cuéllar y terminó perdido por la línea de fondo, sin problemas para el conjunto rojiblanco, ayer de verde.

Lo más destacado del Sporting en esta primera mitad fue el aspecto defensivo, en el que el colombiano Bernardo, una vez más, destacó en el juego aéreo de una forma contundente y con una evidente superioridad sobre los rivales.

Tras el descanso, el Sporting salió mejor posicionado en el campo y llevó mejor el control del juego. El centro del campo parecía más asentado y el Numancia encontraba demasiadas dificultadas para hacer su juego directo. Los gijoneses llegaban poco, pero lo hacían con cierto peligro. Un centro de Nacho Cases lo cabeceó Carmona con susto para la parroquia local.

Sin embargo, cuando el conjunto gijonés parecía más entonado dentro del ritmo espeso que tenía el partido, llegó el gol del Numancia en una acción en la que Lora y Sergio no se entendieron, lo que aprovechó Sergi Enrich para lanzar un disparo cruzado al que no pudo llegar Cuéllar.

El partido cambió totalmente de decoración. El Sporting pasó a asumir el mando con más ambición en busca del área de Biel Ribas. Los rojiblancos no se conformaban y se lanzaban al ataque, aunque con demasiadas prisas, lo que provocaba imprecisiones. Abelardo modificó el equipo con la entrada de Juan Muñiz por Carmona, en la banda derecha, e hizo debutar a Rachid en la posición de Sergio. El centro del campo, con el argelino y Nacho Cases, empezó a tener dominio gijonés. La presencia ofensiva también ganó con la entrada de Pablo Pérez en la posición del desdibujado Álex Barrera.

La primera clave del partido se produjo a los 71 minutos, al ver Juanma la segunda tarjeta amarilla. El Numancia se quedaba en inferioridad numérica y perdía gas en ataque, ya que Anquela se vio obligado a meter al defensa Gaffoor por el atacante Natalio.

Velocidad de Jony

El Sporting apretó el acelerador, pero se encontró con un rival muy sólido en el juego aéreo. Las imprecisiones por las prisas empezaron a cambiarse con la búsqueda de las bandas. La rapidez de Jony se dejó notar. El defensa Kader acusó el esfuerzo y tuvo que ser sustituido por Ito para retrasarse Valcarce al lateral. Los gijoneses presionaban, mientras que el Numancia salía al contragolpe. Lo más peligroso de los locales fue un lanzamiento de falta de Palanca que dio en la parte exterior del poste izquierdo de Cuéllar.

Los últimos diez minutos fueron de avalancha gijonesa. Con todo perdido, Abelardo metió a su equipo en el campo rival. El primer aviso fue un disparo cruzado de Pablo Pérez tras un servicio de Cases. Esta ofensiva hizo titubear a los numantinos. El merecido empate llegó en una acción de Guerrero, quien paró el balón con el pecho en el área soriana y disparó a la media vuelta a donde no podía llegar Ribas.

El Sporting, lejos de conformarse con el empate, mantuvo su ofensiva en busca de la victoria. Pudo lograrla Juan Muñiz en un disparo que la defensa despejó a córner y Bernardo en un cabezazo, tras el saque de esquina. El premio total llegó a tres minutos del final tras una jugada extraordinaria de Jony que empujó Juan Muñiz al fondo de la portería.

El Sporting consiguió un triunfo trabajado y merecido en Los Pajaritos, sobre todo por la labor realizada en la última fase del encuentro, en la que superó al Numancia. Fue la fase más bonita de un partido que al principio resultó poco vistoso, aunque, desde el punto de vista gijonés, resultó efectivo por su buen dispositivo en defensa.

Lora estuvo en un buen nivel y en el centro de la zaga Luis Hernández ofreció seguridad, mientras que Bernardo estuvo sensacional. En el centro del campo, el trabajo de Cases fue clave, sobre todo en la última fase, en la que asumió protagonismo y dominio, con desparpajo de Rachid. La entrada de Juan Muñiz también dio otro aire al estilo ofensivo del equipo para firmar una victoria ilusionante. La alta presencia de canteranos es un dato para reflexionar después de tantas temporadas con inútiles inversiones foráneas. Está demostrado que en la mayoría de las ocasiones las soluciones están en casa.

Foto y fuente : Real Sporting Web

Muy contenta , da gusto empezar la liga ganando, ahora poco a poco. No pude ver el partido, pero por lo que leí Cuéllar jugó muy bien , muy contenta de que Abelardo siga confiando en él, se lo merece.

No hay comentarios:

Publicar un comentario